El Gallinero
Como la ultima parábola que tiré me quedó tan buena voy a tirar otra, pero no se la voy a contar a Miguelito porque el tipo no sabe apreciar mi intelecto.
Resulta que este guajiro tenía un gallinero enorme. El guajiro estaba muy orgulloso de su gallinero y lo cuidaba como cosa buena, hasta que un día llegó un tipo de Labana y le propuso un negocio al guajiro.
"Mira chico, tu estas poniendo viejo, ¿por que no dejas que yo te cuide tu gallinero y así descansas?"
"Compay, mire que yo cuido mucho a mis gallinitas, ¿usted me asegura que las puede cuidar tan bien como yo?"
"Asere, fíjese si yo soy experto en las gallinas que le garantizo que en dos meses usted va a tener el doble de las gallinas que tienes ahora, la producción de huevos se triplicara, y las todas las gallinas van a saber leer y escribir."
El guajiro se quedó deslumbrado y decidió aceptar el negocio.
Pasó un mes y el guajiro regresó a la finca pa'ver como iban las cosas y vio que el gallinero estaba todo cagado, que la producción de huevos estaba por el piso, y que las gallinas estaban flacas y desplumadas. Muy preocupado fue a hablar con el tipo.
"Oiga compadre, ¿que ha estado pasando por aquí?"
"Coño socio, fíjate que jodienda. Cuando empecé el programa para subir la producción de huevos, me dí cuenta que tenia que conseguir mas pienso, así que para poder comprar el pienso maté unas cuantas gallinas y las vendí. Pero entonces las otras gallinas se pusieron nerviosas y un burujún de ellas se largaron pa'l monte. Traté de producir mas huevos con las que quedaban pero estaban tan hambrientas que solo me daban un huevo cada tres días. Pero no te preocupes socio, ya esto está arreglao, de aquí pa'lante todo está bacán!"
El guajiro se fue, todavía preocupado pero con esperanzas. A las dos semanas regresa y ve que las cosas están peor, el gallinero esta desbaratado, los únicos huevos que hay se los están comiendo unas tiñosas que se pasean por la finca, y las gallinas están mas flacas y mas jodías que nunca.
"Oye compay, ¿que es esto? ¡Usted ha desbaratado mi gallinero!"
"¿Que yo qué? ¡Usted es tan desagradecido como sus gallinas! Yo vine aquí porque su gallinero se iba abajo, y me he estado partiendo el lomo pa'salvarlo. Pero fíjate, tu sabes que como estoy arrancao no he podido conseguir ni pienso ni alpiste. Pero tu vecino, el muy hachepé, les esta dando pienso de maíz a sus gallinas, y cuando tus gallinas se enteraron de eso se empezaron a mandar pa'lla a to'meter. Tuve que repartir palos pa'que no fueran todas."
"Oiga, pero ¿usted no me dijo que era un experto en gallinas? ¿Como usted no sabia que para mantener un gallinero había que tener pienso?"
"No chico, yo sabia eso, pero me imaginaba que podía criar una 'gallina nueva', que iba a vivir de la retorica y de la promesa del futuro. Pero lo que pasa es que tus gallinas son unas descaradas, que solo se preocupan en como buscarse la jama. Después de todos mis sacrificios y de promesas, se siguen yendo pa'casa de tu vecino. Te digo, ¡lo que me dan ganas es de sentarme y escribirles una cartica!"